martes, 30 de septiembre de 2008
DOSSIER: CINE DE ZOMBIES ENTRE 1968 Y 1974
Recientemente se cumplieron 40 años del inicio del cine de zombis moderno, con La noche de los muertos vivientes (Night of the living dead, 1967) de George A. Romero. Tal vez con permiso de Plaga de Zombies (John Gilling, 1966), la película de la Hammer, pero ésta en realidad seguía la pista de los clásicos sobre el tema que dirigió Jacques Tourneur en los años 40, presentando los zombis al estilo haitiano y con un concepto del terror clásico y gótico.
Sin embargo, la segunda parte de La noche... se haría esperar hasta 11 años, cuando el maestro del giallo Dario Argento puso el capital necesario para el rodaje de Zombi (Dawn of the dead, versioneada nuevamente en 2004).
Así que voy a hacer un repaso, en algunos casos escueto (ya que algunas merecerán en su momento un hueco en la sección The Z Files), de las películas del subgénero rodadas en los años siguientes, deteniéndome en 1974 (otro día quizá llegue mas lejos, aunque la proliferación de estos títulos en los 80 lo hace casi imposible por motivos de espacio), pues en ese año se estrenó la que entiendo primera secuela española específica de la película de Romero.
Intentaré saltarme films de episodios en los que alguno de ellos trata el tema, como la británica Condenados de ultratumba (Tales from the crypt), dirigida por Freddie Francis en 1972 y basada en los cómics de la EC) o aquellas que incluyen seres de características afines.
Tal vez no están todas las que son pero son todas las que están.
Astro Zombies (1968): Dirigida por Ted V. Mikels. Un típico producto a medio camino entre las series B y Z que pretende conjugar elementos de ciencia ficción y el floreciente cine de zombis. A destacar únicamente la presencia de unos jóvenes David Carradine y Lance Henriksen.
La noche del terror ciego (1971): Inicio de una trilogía española (con leve participación portuguesa) dirigida por el gallego Amando de Ossorio, que se continuaría en El ataque de los muertos sin ojos (1973) y La noche de las gaviotas (1975). No sabía si incluirla aquí, pues merecería capítulo aparte y seguramente lo tendrá. Pero leí que el titulo previsto fue modificado por asemejarlo a la película de George A. Romero, así que pensé que se quiso de algún modo relacionar con ella.
Con influencias de las leyendas de Bécquer, en especial El Monte de las Ánimas y El miserere, la trama transcurre en la imaginaria y abandonada localidad de Berzano, en la que unos antiguos monjes templarios fueron sacrificados por practicar cultos satánicos y sus cuerpos expuestos publicamente, siendo sus ojos comidos por los pájaros. Ahora, sus cadáveres momificados resucitan localizando víctimas a través del oído (algo absurdo porque tampoco tienen orejas) para continuar con sus sacrificios.
El film de Ossorio cuenta con las para la época inevitables escenas de destape y en ella podemos destacar, desde el aspecto visual, la imagen de los monjes sobre sus caballos cabalgando a cámara lenta. En realidad podríamos hablar de tetralogía porque aparte de las tres mencionadas, El buque maldito (1973), del mismo director, se mueve en un argumento similar.
Virgen entre los muertos vivientes (1971): El prolífico (más de 200 películas) Jesús Franco (también Jess Franco, Jess Frank, Clifford Brown, John O'Hara, Preston Quaid o el que prefieran de sus múltiples seudónimos) abandonó el cine de género de cierta seriedad y valor que practicaba en sus comienzos, con ejemplos como Gritos en la noche (1962), e incluso Las vampiras (Vampyros lesbos, 1971) para adentrarse cada vez más en los terrenos de las coproducciones de terror de serie Z y el softcore, juntando ambos o por separado. Aquí tenemos uno de los ejemplos.
De la trama argumental mejor no hablar, pero si conocen la prolífica obra de Jess ya saben lo que les espera y hasta lo pueden pasar bien. Son muchos los que valoran su particular universo, y no seré yo quien los contradiga.
También conocida como Christina, princesse de l'erotisme, La noche de las estrellas fugaces o incluso Zombi 4: virgin among the living dead (suponemos que en aquellos países que se estrenara con retraso, pues no tiene relación con ninguna saga zómbica) ,fue coproducida entre Francia, Italia y Liechtenstein.
La rebelión de las muertas (1972): Otra propuesta demencial, en este caso de otro dúo fundamental en el cine de terror más underground en lengua española. El director argentino León Klimovsky y el actor Paul Naschy (Jacinto Molina), aquí además interpretando varios papeles, entre otros el de demonio o a un místico hindú que investiga un caso extraño a requerimiento de la protagonista.
También conocida como Vengeance of the zombies, la trama (por decir algo) mezcla muertas vivientes (si, lo escribí bien, solo de género femenino), vudú, un asesino enmascarado al estilo de Fantomas o de las primeras películas del giallo, e incluso una chica cubierta de oro como en James Bond contra Goldfinger (Guy Hamilton, 1964).
La noche de los muertos vivientes 2/Children shouldn’t play with dead things (1972): Pese al título con que se estrenó en España, no tiene nada que ver con la trilogía de Romero.
Bob Clark, director que ya apareció al referirme a Asesinato por decreto, y que igualmente produjo Deranged (Jeff Gillen-Alan Ormsby, 1974), pero que también filmó cosas tan infumables como la saga Porky's, realizó este film casi amateur, pleno de nombres desconocidos, y que podemos inscribir sin pudor en el inframundo de las series Z.
Un grupo de actores, junto con su tiránico director, desentierran un cadáver en un cementerio y realizan un ritual de resurrección, que inicialmente creen fallido, pero desde luego no es así, e imaginemos lo que viene después.
Un título para olvidar, solo para muy fanáticos y curiosos del género. Por cierto que la serie Sobrenatural tituló así un episodio de su segunda temporada, suponemos que a modo de homenaje.
La venganza de los zombies/Sugar Hill (1974): El género blaxplotation también tuvo su vertiente terrorífica y versioneó todos los temas clásicos del género, aunque con resultados tan malos como poco recordados. Ahí están ejemplos como Blacula (William Crain, 1972) y sus continuaciones.
El turno para el cine de zombies (los que aquí aparecen, con bastantes telarañas o algo similar) llegó con esta olvidable película, dirigida por Paul Malansky, que, sin embargo, era nombrada en Pulp Fiction (Q. Tarantino, 1994) donde además, el personaje de Samuel L. Jackson tenía una estética inspirada en la del protagonista de la presente.
No profanar el sueño de los muertos (1974): Cierro el repaso con esta coproducción hispano-italiana rodada en la ciudad inglesa de Manchester, y dirigida por Jorge Grau, realizador con una curiosa filmografía que incluye desde alguna otra aproximación interesante al cine de género, como Ceremonia Sangrienta (1973) sobre la vida de la Condesa Bathory, protagonizada por Lucía Bosé, hasta cine de trasfondo político o las inevitables concesiones al destape de la época, como La trastienda (1976).
Muy influenciada por Night of the living dead (la aparición del primer muerto viviente es casi calcada), está algo lastrada por un ritmo lento y por un flojo guión con una excusa pseudo-ecologista, ya que las resurrecciones son provocadas por una máquina para el control de plagas que utiliza el Ministerio de Agricultura, pero que justifica débilmente otras cosas que ocurren, así como ingenuas visiones de la drogadicción o la presencia de un protagonista de estética tardo-hippy y reivindicativa (que alerta de lo que está pasando pero nadie le escucha).
Como es habitual, cuenta en el reparto con actores de prestigio en horas muy bajas, como el secundario del cine americano de los 40 y 50 Arthur Kennedy, o en menor medida, Ray Lovelock. Buenos efectos de maquillaje del italiano Giannetto de Rossi, un habitual de estas películas.
También conocida (según paises o ediciones videográficas) con los títulos: Don’t open the window, The living dead at the Manchester morgue, Fin de semana para los muertos o Let the sleeping corpses die. Premiada en Sitges.
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1 comentario:
Muy buen informe sobre zombies setenteros¡¡. Yo tengo la de Jess Franco pero no la he visto completa aun, sólo los destapes, vaya. Sobre "No profanar el sueño de los muertos" coincido contigo, resulta lenta y floja, sólo se anima hacia el final, hubiese sido mejor algo mas de terror en el metraje. "El buque fantasma" es un clásico, me encantan esos zombies¡¡. Las demas no las he visto, ya me haré de ellas. Muy buen trabajo. Saludos¡¡¡
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